Hace 20 años renuncié al PRI por una imposición del candidato al gobierno de Zacatecas. La ciudadanía me apoyó y ganamos.
20 años después, con condiciones diferentes y más experiencia, estoy ante una nueva adversidad, la cual, seguramente también con carácter, vamos a enfrentar.
Han sido 20 años de acompañamiento al movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador. Reconozco que sería doloroso para mí separarme de la organización que fundé, participan hombres y mujeres extraordinarios que están convencidos de la transformación del país; que creen, como yo, que Andrés Manuel López Obrador es el hombre con más autoridad moral para convertirse en presidente de la República.
Sin embargo, lo que sí debo dejar a salvo es la dignidad, y eso es el fondo del episodio que me ha tocado vivir.